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Un lugar para reconectar
En lo profundo del bosque nuboso de Monteverde, nació Casa Coyota como un refugio para el alma. No fue construida solo como una casa, sino como un espacio vivo, un punto de encuentro entre naturaleza, arte y comunidad.
Aquí, entre neblinas suaves, verdes intensos y el canto de las aves, creamos un lugar donde el tiempo se desacelera y la mente puede descansar.
Monteverde es magia. Y Casa Coyota está justo en medio de ella. Desde cada ventana se ven árboles antiguos y neblina que baila entre las ramas.
Una casa inmersa en el bosque nuboso
Casa Coyota fue diseñada para recibir a quienes buscan algo más que una estancia. Con cinco habitaciones privadas, áreas comunes acogedoras, una cocina equipada y espacios que se adaptan al ritmo de cada visitante, Casa Coyota invita a quedarse, respirar profundo y crear sin prisa.
Pensada para retiros, grupos y creadores
Casa Coyota es para quienes valoran la autenticidad, la simplicidad elegante y la conexión con lo esencial. Cada rincón fue creado con amor, cuidado y respeto por el entorno. Aquí no solo te hospedas: aquí te redescubres.
Un espacio con intención
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